¿Cómo influye mi pensamiento en mi salud, en mi energía, en mi creatividad y en mi capacidad de tomar decisiones?
Los pensamientos se manifiestan como palabras, las palabras como actos, los actos se desarrollan estructurando hábitos y los hábitos se solidifican formando nuestro carácter.
Así que será mejor que vigilemos nuestros pensamientos y sus orígenes con cuidado, porque así como las sombras persiguen al cuerpo, aquello que pensamos, es lo que llegamos hacer.
¿Y tú, reconoces la calidad de tus pensamientos?
Todo ser humano para iniciarse en el camino de la prosperidad, plenitud y felicidad, debe aprender primero a ser un maestro en el arte de pensar virtuosa, correcta, inteligente y sabiamente, ya que la esencia de una vida plena radica precisamente en ese mundo pensante.
William James considerado el padre de la psicología moderna y uno de los psicólogos más renombrados y leídos del siglo XX declaró cuando era Decano de la Universidad de Harvard: “el mayor descubrimiento de mi generación es que los seres humanos pueden cambiar sus vidas, si alteran sus actitudes mentales”.
Libro recomendado:
En el libro de James Allen “Así como el hombre piensa” que recomiendo esta semana, encontramos una gran fuente de apoyo, sobre el poder de nuestros pensamientos para desarrollar buenos hábitos y construirnos un carácter fuerte, noble y lleno de plenitud.
También me gustaría compartir con vosotr@s la influencia que tienen la calidad de nuestros pensamientos en nuestra salud, energía, creatividad y capacidad para tomar decisiones.
Pensamientos del tipo: no hay salida, yo no soy capaz, no puedo etc… se ha demostrado con técnicas modernas de Neuroimagen, que cuando hablamos de esa manera a nuestro Yo interior, la sangre se llena de cortisol y el cerebro de glutamato y…
¿Sabéis lo que produce esto?
- Produce muerte neuronal
- Hace que pensemos con poca claridad
- Nos volvemos irascibles o nos bloqueamos
- Paraliza el sistema digestivo
- Bloquea el sistema de defensas del cuerpo, etc…
En cambio, si un ser humano ante la incertidumbre, ante la complejidad en lugar de arrugarse, dice sí al desafío y a pesar del miedo cree en él, en sus posibilidades en sus recursos…
Está demostrado que:
- Empieza a activarse nuevas conexiones neuronales
- Las neuronas comparten más información
- Nos volvemos seres más inteligentes
- Hay un aumento en el riego sanguíneo del Neo-Cortex
- Pensamos con más claridad
- Tomamos mejores decisiones
- Somos más creativo, porque ves más
- Liberamos dopamina y esto hace que nos sintamos más confiados
Máster en PNL
En el máster en programación neurolingüística enseñamos cómo cambiar nuestra forma de pensar y los estados emocionales para generar acciones y resultados positivos y beneficiosos para nosotros.
Por eso parafraseando al doctor Mario Alonso Puig en la entrevista que la Vanguardia Digital le realizó decía: Hasta ahora lo decían los iluminados, los meditadores y los sabios; ahora también lo dice la ciencia: son nuestros pensamientos lo que en gran medida han creado y crean continuamente nuestro mundo. “Hoy sabemos que la confianza en uno mismo, en entusiasmo y la ilusión tienen la capacidad de favorecer las funciones superiores del cerebro. La zona prefrontal del cerebro, el lugar donde tiene lugar el pensamiento más avanzado, donde se inventa nuestro futuro, donde valoramos alternativas y estrategias para solucionar los problemas y tomar decisiones, está tremendamente influida por el sistema límbico, que es nuestro cerebro emocional”. Por eso lo que el corazón quiere sentir la mente se lo acaba mostrando. HAY QUE ENTRENAR NUESTRA MENTE.
“El hombre es el amo del pensamiento, el moldeador de sus carácter, el arquitecto y el escultor de su condición, de su medio ambiente y de su destino”.
CÓMO UN HOMBRE PIENSA, ASÍ ES SU VIDA es sin duda el libro más famoso de James Allen. Este libro fue escrito para todos aquellos que buscan sabiduría y tranquilidad en un mundo turbulento y hostil como el que nos ha tocado vivir. Para James Allen todos somos responsables de nuestros pensamientos, que son las semillas de lo que ocurrirá en nuestras vidas. El cultivo del «Jardín de la mente» es al mismo tiempo un trabajo y un camino espiritual que Allen nos presena con verdadera maestría. Como escribe James Allen, «sólo el hombre sabio, sólo aquel cuyos pensamientos son controlados y unificados, hace que le obedezcan los vientos y las tempestades del espíritu».